sábado, 18 de junio de 2011

Sauna

Ayer estuvimos de fiesta en casa, los últimos invitados se marcharon sobre las5 de la mañana pero Darío se había acostado media hora antes porque no se encontraba bien. Cuando me quedé solo me metí en la cama con él pero estaba bastante borracho y no podía dormir. Empecé a fantasear con sexo. Sexo con desconocidos naturalmente. Así que me levanté, me vestí y me fui a la calle. Diez minutos después estaba en una sauna sórdida y casi vacía. Apenas podía tenerme de pie de la borrachera que llevaba. Es curioso como antes de salir, mientras estaba en la cama me decía a mí mismo que con lo salido que estaba bastaría cualquiera para hacerme una paja y volver, sin embargo ahora, incluso sabiendo las pocas posibilidades que tenía, no me gustaba cualquiera y no estaba dispuesto a bajar el nivel. Azuzado por el reloj (cerraban en media hora) dejé que un tipo grandullón me metiera mano. Decidimos ir a una cabina, donde descubrí que apenas tendría veinte años. Era alto, guapo y joven y allí estaba un sábado por la noche en una sauna sórdida y vacía esperando que llegara un borracho como yo para correrme en su cara. Antes de correrme me dijo: "Haz conmigo lo que quieras. Te lo digo de verdad, lo que quieras". Me dió un poco de miedo.

Aún después de correrme di una vuelta por el cuarto oscuro. Encontré un señor de unos cincuenta años, gordito y con gafas. Nos metimos mano pero ninguno de los dos nos empalmábamos. Mi dijo que fueramos a una cabina. "¿Para qué?" le dije, y me marché antes de que me contestara.

Volví a casa y por fin pude dormir. Al día siguiente no dije nada. No se porqué. Darío y yo tenemos una relación más o menos abierta, a pesar de lo cual me sigue dando vergüenza contarle ciertas cosas. Una cosa es un polvo de vez en cuando en una situación espontánea y otra estas aventuras morbosas en las que yo me meto. No estoy preparado para contarlo. Pero Darío no estaba tan borracho o tan dormido y se dio cuenta. "Anoche te fuiste después de estar en la cama, ¿No?"
"Si, bueno... estaba muy borracho y no podía dormir. Di un paseo hasta la discoteca, pero no llegue a entrar y me volví" No creo que me haya creído, pero ha hecho como que si.

1 comentario:

  1. Quizás sea importante que se lo crean a medias. Al fin y al cabo, lo importante en una adicción, es poder ser libre de caminar para saciarse con esa dosis de sexo sórdido, o no, que se necesita.

    ResponderEliminar